CIRUGÍA DE GLAUCOMA
Las cirugías de glaucoma son un conjunto de procedimientos que tienen como objetivo conseguir vías alternas de drenaje del humor acuoso. Estas cirugías se realizan para disminuir la presión del ojo, ya que la disminución de este parámetro disminuye la progresión del glaucoma en el tiempo.
No son procedimientos que se realicen para dejar de usar gotas de glaucoma, ya que la mayoría de pacientes seguirán usando estas gotas sin embargo , si se logra disminuir la cantidad de medicamentos que usa el paciente.
Es la cirugía clásica del glaucoma, es utilizada para reducir la presión intraocular cuando los medicamentos ya no son suficientes y la enfermedad continúa avanzando, consiste en un drenaje del líquido humor acuoso hacia un espacio subconjuntival.
Es importante realizarse exámenes previos para determinar el tipo y la fase en la que se encuentra la enfermedad.
Una válvula es un dispositivo de drenaje, colocado a través de una cirugía, para un mejor control del glaucoma. En el procedimiento se introduce un pequeño tubo al interior del ojo (cámara anterior), conectado a un reservorio que se coloca debajo de la conjuntiva.
Esta cirugía se utiliza en caso que la trabeculectomía y la esclerectomía profunda no perforante no han funcionado correctamente.
Es un procedimiento que se realiza en quirófano, el cual consiste en aplicar láser diodo sobre la zona del ojo que produce el humor acuoso (cuerpo ciliar) para que disminuya la secreción de líquido, por lo tanto, la presión intraocular disminuye.
Al ser un tratamiento ciclodestructivo, es decir, destruye el cuerpo ciliar, debe utilizarse como una segunda opción para el glaucoma, cuando otros procedimientos no han funcionado. En la intervención no se realizan incisiones ni suturas y se aplica anestesia local.
La iridotomía es un procedimiento rápido (alrededor de 5 minutos cada ojo) y efectivo que se realiza en la consulta de forma profiláctica para el glaucoma agudo de ángulo cerrado. Con una buena revisión oftalmológica anual se puede diagnosticar el ángulo estrecho de los ojos y prevenir el ataque agudo de glaucoma.
La intervención consiste en practicar un agujero muy pequeño en la periferia del iris que ponga en comunicación las cámaras anterior y posterior para que el líquido que hay en el interior del ojo (humor acuoso), pueda pasar, evitando que se eleve bruscamente la presión intraocular.
El procedimiento se realiza con láser YAG, un avanzado tipo de láser que tiene la propiedad de poder cortar y romper estructuras dentro del ojo, como membranas y cápsulas, actuando como un bisturí a distancia de gran precisión, con las evidentes ventajas que de ello se derivan para el paciente.
Los pacientes suelen poder recuperar su vida normal 24 horas después del procedimiento.
